Buen relato Daron!!! :) :)
Va mi relato del vuelo. Me toca comandar una sección de Panthers salidos desde Río Grande, con misión de CAP al norte del estrecho de San Carlos. Junto a mi, Halcón volvía a ser mi fiel punto.
Despegamos sin demora y con rumbo 45º a 47º nos acercamos a nuestras Islas Malvinas. Por el tipo de misión, volamos a solo el 70% de potencia para ahorrar combustible. La intención era llegar con unos 5000 a 5500 mestros de altura, pero ya con las islas a la vista estabamos todavía en ascenso con 4000/4500 metros. Por lo que decido virar hacia el este (90º) y luego hacia el oeste (270º) para conseguir la altura deseada antes de entrar en el teatro de operaciones.
Cuando estabamos con el rumbo de 270º y con casi 5000 metros, Halcón, que estaba algo lejos a mis 6, me grita que tenía contactos entrandome desde mi derecha y casi a punto de disparar, rompo a mi derecha y logro ver a los contactos, evito que me disparen y también veo el líder enemigo perdiendo combustible, en el combate que siguió, que fue bastante de manual (por parte de los Migs :P), solo pudimos terminar de rematar al líder y gastar combustible siguiendo a gusto de lo que ahora solo el restante contacto quería, ya que aprovechaba excelentemente su diferencia en performance para esperar un error nuestro, y así fue... en un momento veo que pica y no pude ver con claridad que el motivo era la posición de Halcón, al no gritarle, no tuvo chance, en una pequeña y breve ráfaga, le corta un ala y cae, pudiendo por suerte lanzarse en paracaidas. A partir de ahí prosigo mi acecho, pero la realidad indicó lo contrario, siempre fui la víctima, solo era cuestión de tiempo.
El combustible remanente era poco, estaba solo, el enemigo volaba dictando las reglas, en constante calesita y en ascenso, no tenía oportunidad. Cuando lo juzgué oportuno, ubiqué mi posición y decidí romper el combate y dirigirme hacia Puerto Argentino. La idea era obtener algo de ventaja en el viraje y posterior descenso directo hacia la pista, si me seguía (estaba seguro que lo haría), las defensas de la base me darían la mano que me faltaba. Piqué y estabilicé en 750/770 km/h, rogando no hacer ningún movimiento brusco para evitar rotura de la célula. Ya establecido en unos 300/500 metros de altura, hago zig-zag para chequear cualquier posible entrada del Sea Hunter, lo busqué constantemente, ya estaba a unos 10 kms de la base, pensé que ya estaba a salvo, pero no, mi enemigo realmente sabía su trabajo y yo evidentemente no el mío, porque nunca vi como me entró, unos disparos arrancaron mi ala derecha, trato de saltar, pero la fuerzas G lo impedieron.
Va mi relato del vuelo. Me toca comandar una sección de Panthers salidos desde Río Grande, con misión de CAP al norte del estrecho de San Carlos. Junto a mi, Halcón volvía a ser mi fiel punto.
Despegamos sin demora y con rumbo 45º a 47º nos acercamos a nuestras Islas Malvinas. Por el tipo de misión, volamos a solo el 70% de potencia para ahorrar combustible. La intención era llegar con unos 5000 a 5500 mestros de altura, pero ya con las islas a la vista estabamos todavía en ascenso con 4000/4500 metros. Por lo que decido virar hacia el este (90º) y luego hacia el oeste (270º) para conseguir la altura deseada antes de entrar en el teatro de operaciones.
Cuando estabamos con el rumbo de 270º y con casi 5000 metros, Halcón, que estaba algo lejos a mis 6, me grita que tenía contactos entrandome desde mi derecha y casi a punto de disparar, rompo a mi derecha y logro ver a los contactos, evito que me disparen y también veo el líder enemigo perdiendo combustible, en el combate que siguió, que fue bastante de manual (por parte de los Migs :P), solo pudimos terminar de rematar al líder y gastar combustible siguiendo a gusto de lo que ahora solo el restante contacto quería, ya que aprovechaba excelentemente su diferencia en performance para esperar un error nuestro, y así fue... en un momento veo que pica y no pude ver con claridad que el motivo era la posición de Halcón, al no gritarle, no tuvo chance, en una pequeña y breve ráfaga, le corta un ala y cae, pudiendo por suerte lanzarse en paracaidas. A partir de ahí prosigo mi acecho, pero la realidad indicó lo contrario, siempre fui la víctima, solo era cuestión de tiempo.
El combustible remanente era poco, estaba solo, el enemigo volaba dictando las reglas, en constante calesita y en ascenso, no tenía oportunidad. Cuando lo juzgué oportuno, ubiqué mi posición y decidí romper el combate y dirigirme hacia Puerto Argentino. La idea era obtener algo de ventaja en el viraje y posterior descenso directo hacia la pista, si me seguía (estaba seguro que lo haría), las defensas de la base me darían la mano que me faltaba. Piqué y estabilicé en 750/770 km/h, rogando no hacer ningún movimiento brusco para evitar rotura de la célula. Ya establecido en unos 300/500 metros de altura, hago zig-zag para chequear cualquier posible entrada del Sea Hunter, lo busqué constantemente, ya estaba a unos 10 kms de la base, pensé que ya estaba a salvo, pero no, mi enemigo realmente sabía su trabajo y yo evidentemente no el mío, porque nunca vi como me entró, unos disparos arrancaron mi ala derecha, trato de saltar, pero la fuerzas G lo impedieron.